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El mayor teólogo de América, el predicador puritano Jonathan Edwards enseñó: “El camino hacia la voluntad es a través del intelecto”. De hecho, las Escrituras enseñan a este respecto que la salvación — que es nada menos que un compromiso volitivo — depende de un informado intelecto.

En el pasaje de estudio de esta semana, observaremos la importante diferencia bíblica entre el asentimiento intelectual solamente versus esa comprensión intelectual que es el camino hacia un compromiso con Cristo. ¡Pensar que estar casado con Cristo no es más que un reconocimiento mental de Su existencia es, bíblicamente hablando, un error lamentable! Esperemos que al final del estudio tenga una comprensión más clara y mejor de esta distinción.

Que Dios bendiga su tiempo mientras reflexiona sobre este estudio: ¿Le dirá Jesús: “Nunca te conocí?”

 

I.      INTRODUCCIÓN

USTED NO ESTÁ CASADO con su cónyuge hasta que diga “Sí acepto” el uno al otro. Ni estar enamorado emocionalmente ni estar de acuerdo intelectualmente en que la persona que amo es una buena pareja para mí me hace casarme. La emoción y el intelecto juegan un papel en el matrimonio con seguridad, pero es el acto de voluntad o deseo lo que establece el matrimonio.

Lo mismo ocurre con Jesucristo. El paralelo antes mencionado del matrimonio humano es una maravillosa metáfora de la unión divina con Cristo. La analogía también ayuda a comprender la declaración de Jesús en Mateo 7: 21-23 en donde dice:

“No todo el que me dice: “Señor, Señor”, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de Mi Padre que está en los cielos.  Muchos me dirán en aquel día: “Señor, Señor, ¿no profetizamos en Tu nombre, y en Tu nombre echamos fuera demonios, y en Tu nombre hicimos muchos milagros?”  Entonces les declararé: “JAMÁS LOS CONOCÍ; APÁRTENSE DE MÍ, LOS QUE PRACTICAN LA INIQUIDAD.”

Una teología común y equivocada de la “salvación” se llama “creencia fácil.” En esencia, existe una “creencia” en Jesús que no tiene en cuenta la definición bíblica de quién es Él.  De este modo, los seguidores “reciben” a Jesús de acuerdo con su comprensión de quién creen que es Jesús — en contraste con lo que la Biblia revela. En Romanos 10:9-10 la Escritura afirma:

Que si confiesas con tu boca a Jesús por Señor, y crees en tu corazón que Dios lo resucitó de entre los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, y con la boca se confiesa para salvación.

Creer en tu corazón (pisteuo kardia) es la idea griega del compromiso volitivo — algo que Jesús dice que no estaba presente en aquellos de los que hablaba en Mateo 7 (arriba). La cita de Señor, Señor, se refiere a la trágica falta del asentimiento intelectual solamente, versus al compromiso volitivo de creer en tu corazón que es indicativo de la auténtica salvación. Estos pasajes sugieren con creces que para ser verdaderamente salvo uno no solo debe estar de acuerdo intelectualmente, sino someterse voluntariamente al hecho de que Jesús es el Señor (kurios), que significa “soberano”, “maestro” o “jefe.” ¡Kurios es usado como descriptor de Jesús 747 veces en el NT! La creencia bíblicamente fundamentada en Jesús, entonces, requiere que uno se aparte de todo otro entendimientos sobre quién cree que es Jesús y doble la rodilla ante Su Señorío. Esto se conoce como arrepentimiento. ¡Por el contrario, el propio razonamiento sobre Jesús — pensar en Él de otra manera, o de una manera menor, no nos llevará allí (ver 2 Corintios 11:4)!

Curiosamente, al igual que la fe para creer en Jesús (que es un regalo de Dios según Efesios 2:8-9) el arrepentimiento también es un regalo de Dios. Es importante destacar los siguientes pasajes al respecto:

En Santiago 2:19, la Escritura indica que el tipo de “creencia” que posee una persona es profundamente importante. Observe lo que el escritor de Santiago declara a su audiencia engañada sobre la verdadera salvación:

Tú crees que Dios es uno. Haces bien; también los demonios creen, y tiemblan.

Los demonios muestran una comprensión intelectual correcta de quién es Jesús, pero su asentimiento intelectual es insuficiente como lo demuestra la creencia en [sus] corazones, es decir, su rebelión volitiva contra el señorío de Cristo en su ser interior y visceral. Comparados con aquellos a quienes Jesús se dirigía en Mateo 7, los demonios también evidencian que:

ES POSIBLE RECONOCER O “CREER” EN EL SEÑORÍO DE CRISTO SIN DOBLAR RODILLA AL SEÑORÍO DE CRISTO

El punto de Santiago es que ese tipo de “creencia” — lo que llamamos “creencia fácil”— no salva un alma del infierno.  ¡Cristo dirá a los “creyentes fáciles”, jamás los conocí! Apártense de Mí…

¿Cuáles son, entonces, las señales de la falsa creencia, para que pueda estar seguro de que no se engaña a sí mismo acerca de su propia salvación o de seguir a un falso maestro? Efesios 5:5 es un excelente pasaje que nos proporciona una tremenda comprensión y discernimiento de los falsos maestros con respecto a la salvación.  Profundicemos esta semana, reflexionemos y meditemos, en un pasaje particular con esas dos perspectivas en mente. Efesios 5:5-7 lee:

“Porque con certeza ustedes saben esto: que ningún inmoral, impuro o avaro, que es idólatra, tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios.  Que nadie los engañe con palabras vanas, pues por causa de estas cosas la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia.  Por tanto, no sean partícipes con ellos.”

Asegúrese de entender esto: Pablo enumera cuatro características para que nadie [pueda] engañarlo con palabras vanaspara que no sean partícipes con ellos. Cada uno de los cuatro aspectos revelados que tipifican la falsa creencia y los falsos maestros sigue — ¡para que usted sea espiritualmente sabio y discernir sobre esto! ¡Éste es el objetivo de Pablo hoy con respecto a su bienestar espiritual! Pero antes de sumergirnos, examinemos el contexto de Efesios 5: 5-7:

 

II.      EL CONTEXTO DEL PASAJE

A.      SANTIAGO 1:22

Sean hacedores de la palabra y no solamente oidores que se engañan a sí mismos.

B.     SANTIAGO 2:26

Porque así como el cuerpo sin el espíritu está muerto, así también la fe sin las obras está muerta.

C.     1 JUAN 2:4

Él que dice: «Yo lo he llegado a conocer», y no guarda Sus mandamientos, es un mentiroso y la verdad no está en él.

D.     1 JUAN 3:9

Ninguno que es nacido de Dios practica el pecado, porque la simiente de Dios permanece en él. No puede pecar, porque es nacido de Dios.

E.     1 JUAN 4:20

Si alguien dice: «Yo amo a Dios», pero aborrece a su hermano, es un mentiroso. Porque el que no ama a su hermano, a quien ha visto, no puede amar a Dios a quien no ha visto.

Todos estos pasajes sirven para elaborar la verdad bíblica de que el fruto bueno, no el malo, caracterizará a los verdaderamente regenerados: Por sus frutos los conocerán.

HAY MUCHOS PROFESORES FALSOS DE JESÚS EN EL CAPITOLIO

Lo que sigue son las cuatro características externas de los falsos profesores y/o los falsos maestros de la verdadera salvación como se evidencia por y en Efesios 5:5. Una vez más, conocer estos indicadores será de gran ayuda para su discernimiento espiritual y sabiduría personal: ¿A quién va a escuchar en la capital en términos de asesoramiento personal en lo que respecta a las decisiones políticas, así como al consejo espiritual? Saber que las Escrituras enseñan cuáles son señales de falsas creencias y falsos maestros será de gran ayuda para usted. Vamos ahora a “meternos en la cizaña” en lo que respecta a la mejor comprensión de todas las verdades profundas de Efesios 5:5.

 

III.    SON INMORALES, IMPUROS Y CODICIOSOS

Las tres palabras griegas detrás de los subtítulos anteriores apuntan al egocentrismo: la inmoralidad (porneia) se relaciona con la pornografía, la prostitución, la fornicación, el adulterio y el abuso infantil. Todas son formas aberrantes de satisfacción sexual que no tienen en cuenta a la otra persona y que tarde o temprano causan cicatrices profundas en otras personas. La impureza (akatharsia) se relaciona con la inmoralidad mental. Se refiere a la vida de fantasía y otras formas de lujuria mental/sexual/egoísta. La codicia (pleonektes) o avaricia se refiere directamente a la fijación y orientación de auto gratificación comparadas tanto con el creyente fácil como con el falso maestro.

Cada una de estas palabras ilustra una mentalidad de “todo sobre mí.” Describen a alguien que piensa que el mundo gira en torno a él. Los verdaderamente salvos, por otro lado, representan todo lo contrario como comportamiento habitual. Están muertos para sí mismos (Gálatas 2:20) y están más preocupados por los demás que por sí mismos (Filipenses 2:3). ¡Viven para servir a su Salvador! En el pasaje que estamos estudiando, Pablo dice que las personas que muestran un estilo de vida sexual desviado, continuo y no arrepentido – porque con certeza ustedes saben – no son herederos del reino de Cristo.

Al principio de Efesios 5:5, la palabra para certeza (ginosko) también se puede traducir como “determinar, conocer, comprender, percibir y reconocer” tal como se usa en todo el NT.  Por ejemplo, en 1 Juan 5:13, Dios declara que quiere que los creyentes sepan que son salvos. El pasaje dice:

Estas cosas les he escrito a ustedes que creen en el nombre del Hijo de Dios, para que sepan que tienen vida eterna.

DIOS QUIERE QUE USTED SEPA Y TENGA POR SEGURO SI ES SALVO O NO Y QUE POSEE LA CAPACIDAD DE DISCERNIR LO QUE CARACTERIZA LA VERDADERA FE SALVADORA

Cuando esta lista de indicadores de creencia falsa proporcionada en este pasaje se combina con la lista proporcionada en 1 Corintios 6:9-10, nuestra capacidad de saber con certeza quién es salvo y quién no, pierde gran parte de su misterio. Se lee:

¿O no saben que los injustos no heredarán el reino de Dios? No se dejen engañar: ni los inmorales, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los difamadores, ni los estafadores heredarán el reino de Dios.

Al estudiar Efesios 5:5 y 1 Corintios 6: 9-10, comenzamos a saber quién es nuestro campo misionero, sin importar qué lealtad verbal a Cristo puedan testificar externamente. Observe en estos dos pasajes las palabras comunes y los pecados habituales subyacentes que sirven para duplicar las características de las falsedades: visto de otra manera, el pasaje que estamos estudiando es un subconjunto de esta descripción más amplia y completa de los no salvos. El resumen de Efesios sobre la desviación sexual, de que son inmorales e impuros, se identifica más específicamente cuando Pablo escribe a los Corintios: asociado a la creencia fácil y los falsos maestros es la fornicación habitual, el adulterio y la homosexualidad. Entonces:

AQUELLOS QUE DESFILAN POR EL CAPITOLO  NOMBRANDO EL NOMBRE DE CRISTO Y QUE APRUEBAN TALES COSAS SON LAMENTABLEMENTE IGNORANTES COMO CREYENTES VERDADEROS – BEBÉS CREYENTES QUE CAMBIARÁN CUANDO SE ENFRENTEN A LA CLARIDAD DE LA ESCRITURA – O DEFINITIVAMENTE NO SON CREYENTES

Determinar lo contrario es decir que la Escritura no es inspirada y/o que Pablo de alguna manera estaba mal guiado. Si usted cree que la prueba de fuego de Pablo es un poco dura, ¿puedo desafiarle a que permita que las Escrituras sean su guía para discernir quién es más probable que sea salvo y quién no frente a sus propios pensamientos, tal vez bíblicamente desinformado sobre el tema; confíe en que Dios y Su Palabra le ayudarán a descifrar tales cosas.

 

IV.     SON IDÓLATRAS

Otro indicador de la existencia o no existencia de la verdadera fe salvadora es la característica de la idolatría. Los idólatras son aquellos que adoran algo por encima de Jesucristo en detrimento de Él — es decir, su ocupación principal en la vida es algo que reemplaza su preocupación y lealtad al SEÑOR. Habitual y continuamente, algo más es mucho más importante para ellos: ya sean sus filosofías no bíblicas hacia la vida, sus fijaciones vocacionales (es decir, carrera política), sus actividades recreativas o sus obsesiones egoístas con cosas como el dinero y la fama.  Cuando este tipo de cosas compiten y disminuyen la confianza y la dependencia de uno en el Señor, entonces esa persona está manifestando un comportamiento idólatra. No es casualidad que los dos primeros de los Diez Mandamientos sean prohibiciones relacionadas con la idolatría. Una y otra vez en el AT Israel cayó en la adoración de algo diferente al SEÑOR Dios, y las consecuencias fueron desastrosas.

Observe en el pasaje principal del estudio que la idolatría se usa para definir aún más la avaricia. . .  un hombre avaro, es un idólatra. Nuevamente, esa palabra avaro se traduce/entiende mejor hoy como descriptiva de alguien que es codicioso.  Se refiere directamente a la orientación de auto gratificación de un individuo.  Éste es un lenguaje bíblico que identifica y condena la mentalidad de “todo sobre mí” que prevalece hoy en día. La idolatría, por lo tanto, define aún más la codicia en el sentido de que existen algunos tipos de auto-orientación más allá de una orientación de Dios. La palabra griega para idólatras es eidololatres, que significa “falta de conocimiento de Dios y gratitud a Él.” “Un idólatra es un esclavo de las ideas depravadas que sus ídolos representan.”  A la larga, todos estos dioses juntos nunca podrán satisfacer al idólatra; solo adorando al Dios vivo y verdadero puede el hombre caído, que tiene un vacío en el corazón por el pecado, encontrar calma y satisfacción eterna. En resumen:

¡SEA CORRECTAMENTE ESCÉPTICO DE AQUELLOS QUE DAN UN AURA DE SER SEGUIDORES DE CRISTO PERO SON LEALES A ALGO O ALGUIEN QUE NO SEA JESUCRISTO!

Por el contrario, Dios declara en Éxodo 34:14:

No adorarás a ningún otro dios, ya que el SEÑOR, cuyo nombre es Celoso, es Dios celoso.

Los creyentes, que son receptores de la morada del Espíritu Santo en el momento de su salvación (Romanos 8:9) son muy sensibles a dar su “En Pos de Lo Supremo” (como un autor ha titulado su libro). Amados, los que creemos en la comunidad del Capitolio debemos rápidamente huir de la idolatría (1 Corintios 10:14). Es debido a la existencia de idolatría y las otras características enumeradas aquí que la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia, una de las estrofas finales en nuestro pasaje inicial. No se equivoquen: los falsos creyentes y maestros eventualmente experimentarán Su ira. Esa es una promesa de nuestro pasaje. Como líderes de nuestra gran nación, no deben ser ese tipo de modelo, para que no sean ejemplo a otros – y a nuestra nación.

Por consiguiente, ¡que nunca participemos de nada que insinúe idolatría! Las consecuencias son serias. Conducirá a su ruina y a la mía también. En todo el AT, este pecado es el que invoca la ira de Dios sobre Su pueblo elegido hasta el punto de que perdieron repetidamente su nación y fueron tomados cautivos por otros imperios (Asiria y Babilonia). Si le falta aprobación, ¿quizás la idolatría sea la razón?

Para que no haya dudas sobre la salvación de aquellos que son idólatras habituales, tanto Apocalipsis 21:8 como 22:15 dejan perfectamente claro que ningún idólatra habitual heredará el Reino de Dios. La idolatría habitual no es característica de aquellos que están verdaderamente arrepentidos y habitados por el Dios Viviente. Por lo tanto, es un signo revelador de falsas creencias y falsos maestros.

1. SON ENGAÑADORES

Los falsos creyentes y maestros no solo son sexualmente aberrantes y se centran en algo más que la gloria de Dios, sino que también tienen una propensión a engañar a los verdaderos seguidores del Cristo de la Biblia. Nuestro pasaje inicial afirma, Que nadie los engañe con palabras vanas (Ef. 5:5-7). La gente siempre intentará socavar la autenticidad de lo que dice la Palabra de Dios sobre las creencias falsas. Encontrará personas que intentarán rebajar la integridad de este Estudio Bíblico, o de mí.  El creyente inteligente es advertido por las Escrituras para vigilar esto.  “La gente tratará de negar [que estas características son evidencia de incredulidad] diciéndole que el pecado es tolerable y que Dios no excluirá a los pecadores no arrepentidos de Su reino.” Los engañadores, mis amigos, poseen palabras vanas. La palabra griega que Pablo usa aquí para engañar es apate. Significa: “Lo que da una falsa impresión, ya sea por apariencia, declaración o influencia.” ¡Lo interesante del engaño es que no te das cuenta de que te está sucediendo!  Solo conociendo la Palabra de Dios y lo que dice es que usted puede evitar el engaño a través de la sabiduría y el discernimiento.  Nuevamente, “por sus frutos los conocerán.” ¡Conviértase en un inspector de frutos capacitado! De una manera muy directa, Colosenses 2:8 exclama:

Miren que nadie los haga cautivos por medio de su filosofía y vanas sutilezas, según la tradición de los hombres, conforme a los principios elementales del mundo y no según Cristo.

Los falsos cristianos no coinciden con las Escrituras.  Lo que dicen, si usted conoce la Palabra, será visto como falso. Tendrá la certeza de su invalidez. Para aquellos que carecen de discernimiento y no les importa ganarlo, Proverbios 1:22 y 14:15 deben hablar en voz alta:

¿Hasta cuándo, oh simples, amarán la simpleza?

El simple todo lo cree, pero el prudente mira bien sus pasos.

 

VI.     SON DESOBEDIENTES

Los falsos creyentes y maestros son sexualmente aberrantes, idólatras y engañosos. Pablo agrega una característica más: la desobediencia habitual o la rebelión. La Escritura es clara en que los que se salvan se someterán a líderes espirituales legítimos, hombres que Dios ha dado a su Iglesia (Efesios 4:11-12). Hebreos 13:17 declara: Obedezcan a sus pastores y sujétense a ellos. . . Los verdaderos creyentes disfrutan sometiéndose a verdaderos y humildes líderes cristianos, pero los falsos seguidores de Cristo desprecian a los líderes espirituales legítimos todo el tiempo. Por ejemplo:

LAS PERSONAS QUE PROMOCIONAN EL CRISTIANISMO EN EL CAPITOLIO DE ESTADOS UNIDOS Y LOS CAPITOLIOS ESTATALES DE AMÉRICA AL MISMO TIEMPO NO LES AGRADA LA IGLESIA LOCAL

De lo que hemos aprendido, esto es así, ¿verdad? Mientras que el verdadero seguidor de Cristo tiene una voluntad contrita y quebrantada en sumisión al señorío de Cristo y a Sus embajadores, el apóstata prefiere gobernar su propia vida, hacer lo suyo y desobedecer la Palabra de Dios y Sus embajadores de este lado del cielo.

Una actitud de desobediencia espiritual es otro signo revelador de creencia falsa. En el libro de Judas (v.16-17) se utiliza el siguiente descriptor de resumen apropiado para describir a estas personas:

Estos son murmuradores, criticones, que andan tras sus propias pasiones. Hablan con arrogancia, adulando a la gente para obtener beneficio.  Pero ustedes, amados, acuérdense de las palabras que antes fueron dichas por los apóstoles de nuestro Señor Jesucristo.

Esté atento a aquellos que tienen dificultades para seguir a los líderes cristianos legítimos y humildes.

 

VII.    RESUMEN

El apóstol Pablo concluye; Por tanto, no sean partícipes con ellos. La palabra para los participantes (summetochos) se usa solo aquí y en Efesios 3:6 en todo el NT. La palabra significa: “Uno que comparte una posesión.” En otras palabras, los creyentes deben asegurarse de no unirse o copiar las formas pecaminosas que caracterizan a los falsos creyentes. Efesios 3:6 declara exactamente lo opuesto respecto a los verdaderos creyentes; ellos son “coherederos y miembros del mismo cuerpo, participando igualmente la promesa en Cristo Jesús mediante el evangelio”. En otras palabras, comparten la posesión del evangelio y todas las responsabilidades que conlleva tal llamado.

Por último, es importante comprender lo que este pasaje no está enseñando: Veamos el artículo de O’Brien a este respecto:

Es cierto que los pecadores persistentes como los inmorales, impuros y codiciosos no tienen parte ni suerte en el reino celestial de Dios. A los creyentes ya se les ha asegurado que tienen una esperanza segura de heredar la gloriosa vida por venir (1 Juan 5:11-12).  Aquellos que se han entregado a la inmoralidad, la impureza y la codicia, incluso si se hacen llamar Cristianos, muestran que están excluidos de la vida eterna. El apóstol no está afirmando que el creyente que alguna vez cae en estos pecados es automáticamente excluido del reino de Dios. Más bien, lo que se contempla aquí es la persona que se ha entregado sin vergüenza o arrepentimiento a este estilo de vida” (Énfasis son míos).

No se apresure a juzgar a un creyente genuino como un hereje porque él o ella pecaron; se arrepentirá y volverá a la normalidad. Él tendrá hambre de que los caminos de Dios sean sus caminos. La Escritura seguirá siendo su plomada.

Por otro lado, no sea ingenuo. Todos en el Congreso que afirman que son cristianos pueden no serlo. Las Escrituras le proporcionan las herramientas para discernir sobre tales cosas, incluida su propia salvación. Por lo tanto, es apropiado anotar 2 Corintios 13:5 para terminar:

Pónganse a prueba para ver si están en la fe. Examínense a sí mismos. ¿O no se reconocen a ustedes mismos de que Jesucristo está en ustedes, a menos de que en verdad no pasen la prueba? cm