Cómo Lograr Cambio y Crecimiento en Tu Vida
Descargar Estudio BíblicoLO QUE ESTÁS A PUNTO DE LEER no es algo que puedas encontrar en un seminario típico secular, de autoayuda que te llenan de energía.
No tiene nada que ver con lo que los gurús del crecimiento personal ofrecen en innumerables series de audio, volúmenes de libros o en ardientes seminarios después de que llegan a la ciudad con mucha fanfarria para enseñarte cómo vivir el momento, apuntar a las estrellas y crecer en su ser más grande y poderoso.
Lo que estás a punto de leer no tiene nada que ver con eso. Lo que sigue es la fórmula bíblica para el crecimiento, y se encuentra en un profundo y severo contraste con las nociones del mundo de cómo lograrlo.
A diferencia de las materias idealistas que se compran y venden hoy en día, la fórmula bíblica para el crecimiento no es agradable, ni gratificante para el ego. Es un trabajo duro y tiene todo que ver con llegar al final de ti mismo y entender la necesidad crítica de arrepentimiento y apartarse del pecado.
Sigan leyendo mis amigos,
Ralph Drollinger
I. INTRODUCCIÓN
La Biblia tiene mucho qué decir acerca de cómo una persona puede cambiar; de hecho, las Escrituras revelan que aquellos quienes están en Cristo cambiarán para mejor. Pero exactamente, ¿cómo sucede esto? O mejor, ¿cómo el creyente es (para utilizar el término teológico apropiado) santificado? Además de todas las teorías seculares acerca de lograr el crecimiento personal y el cambio para mejor, existen al menos cuatro importantes puntos de vistas teológico/históricos presentados en respuesta a esto, pero como verás, solamente uno de ellos tiene una base bíblica sólida. Muy brevemente son:
A. PERFECCIONISMO TOTAL
La primera es conocida como Perfeccionismo Cristiano, emana de Carlos Wesley, el histórico líder inglés del movimiento metodista. Aquí una supuesta segunda obra de la gracia, la post salvación, catapultas al creyente en un estado de “sin pecado”. Otro nombre para esta idea errónea es “entera santificación”. El creyente puede cometer errores, pero supuestamente ya no es pecado. El crecimiento espiritual es indicado por el aumento de las buenas obras. Sencillamente, en un sentido del mundo real, el Perfeccionismo Wesleyano es problemático porque uno sólo necesita pedir el cónyuge perfecto si él o ella es perfecto. La realidad práctica sugiere que la total santificación/perfeccionismo no es alcanzada por ningún creyente en esta vida, ni es una opinión corroborada por las Escrituras.
B. CRECIMIENTO PASIVO
Un segundo punto de vista más amplio de la Santificación es el de Keswick (pronunciado “Kezzek”) escuela de pensamiento. En este entendimiento, el creyente pasivamente crece en su relación con Cristo. Una necesidad sólo “rendirse” para crecer espiritualmente. Sólo sigue bebiendo de la Biblia y madurarás. “Dejarlo en las manos de Dios” es una síntesis apropiada de esta forma de pensamiento. Pero como se verá a continuación, la gracia de Dios permite la responsabilidad humana en el proceso de santificación y hay una expectativa bíblica para la actuación de la voluntad humana en el logro del crecimiento espiritual.
C. PENITENCIA Y REMORDIMIENTO
Esta tercera posición es comúnmente practicada en las sectas. Es conocida como la penitencia. Mientras que las dos anteriores posturas son practicadas por error entre aquellos con una Soteriología bíblica (es decir, una comprensión adecuada de lo que la Biblia enseña acerca de la verdadera fe salvadora), la penitencia es la idea de imponer algo como un castigo por el pecado – es un intento humano para equilibrar la balanza. En el mundo de los buscadores de penitencia, ni la justificación (la salvación) ni la Santificación (el crecimiento espiritual) son atribuciones de Dios por Su sacrificio (según las verdades de 1 Juan 1:9 y muchos otros pasajes). Más bien, la salvación y santificación son ganados a través del esfuerzo o mérito personal. De esta manera de pensar se deduce que, si uno es salvado por mérito personal entonces él crece por mérito personal. Uno es santificado por la realización de buenas obras, obras compensatorias o de oraciones a fin de apaciguar (satisfacer) sus malas acciones; uno es “culpable” para lograr el cambio. El problema es, comparado con las posiciones anteriores, que no hay sustento, base bíblica, para tal creencia o práctica.
D. SANTIFICACIÓN PROGRESIVA
La cuarta posición sobre Santificación es la que está respaldada por la Biblia: Santificación Progresiva. La Biblia repetidamente revela que un proceso permanente de arrepentimiento y renovación hacia la semejanza a Cristo1 – y este proceso de crecimiento sólo será completado cuando uno va a casa a estar con Dios. No existe la perfección en este lado del cielo. El crecimiento y el cambio se logran a través de la participación activa y la disciplina del creyente a quien el Espíritu Santo impulsa y activa para la tarea. Filipenses 2:12-13 y muchos otros pasajes apoyan esta síntesis de Santificación:
Por tanto, amados míos, ya que siempre han obedecido, no sólo en mi presencia, sino mucho más ahora en mi ausencia, ocúpense en su salvación con temor y temblor, porque Dios es el que produce en ustedes lo mismo el querer como el hacer, por su buena voluntad.
Noten este pasaje detenidamente: ocúpense (de la palabra griega katergazomai) no se está refiriendo a la salvación por obras,2(Romanos 3:21-24; Efesios 2:8,9; Juan 1:12; Romanos 10:9), sino que más bien es descriptivo de la responsabilidad que el creyente necesita tener después de ser salvado por la gracia de Dios. Y el hecho de que porque Dios es el que produce en ustedesevidencia el agente causal (Dios) que engendra y empodera el trabajo de Santificación en la vida del creyente después de ser salvos. Otros pasajes que apoyan la enseñanza bíblica de la santificación progresiva son Filipenses 3:13-14; Romanos 6:19; Hechos 1:8; 1Corintios 9:24-27; 15:58; 2Corintios 7:1; Gálatas 6:7-9; Efesios 4:1; Colosenses 3:1-17; Hebreos 6:10-11; 12:1-2; 2Pedro 1:5-11. Cada pasaje destaca la santificación progresiva, en donde Dios quien está trabajando en ti es el que impulsa al creyente, y su responsabilidad de trabajar, aceptando responsabilidad personal – para lograr crecimiento espiritual mientras Dios dirige en su corazón.
II. FUNDAMENTOS BÍBLICOS RELACIONADOS A LA SANTIFICACIÓN
La lista de versículos bíblicos antes mencionada son dignos de mención y reflexión antes de seguir antes de avanzar conjuntamente en el desarrollo de este estudio (pero son una recopilación muy extensa para incluir en lo que espero se limite a 12 páginas sobre el tema). En resumen, la responsabilidad humana – trabajando en su Santificación- es catalizadora para el cambio. Pero más específicamente, ¿cómo? Lo que sigue a continuación son los cuatro fundamentos bíblicos relacionados a la Santificación.
A. TODOS LOS CAMBIOS DEBEN ALINEARSE CON LAS ESCRITURAS
Puesto que la Biblia es inspirada por Dios, es el fundamento de toda verdad. “Él está presente y no está callado”, escribió Francis Schaeffer. En otras palabras, Dios se ha revelado al hombre no sólo en el advenimiento de su Hijo Jesucristo, pero en su santa Palabra. La Escritura, por lo tanto, debe ser la única fuente epistemológica (es decir, el único fundamento de conocimiento) en lo que se refiere a la fe, la práctica y cambios. Note que la declaración interna de las Escrituras acerca de sí mismo en lo que se refiere a cambios:
2 Timoteo 3:16 “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia,”
La construcción griega de este importante pasaje se traduce mejor, “Toda la Escritura es dada por inspiración…” Observe que Dios inspiró las Escritura con el propósito específico de ser útil para enseñar, redargüir, corregir e instruir; todas estas palabras conllevan cambio que es informada y guiada por verdades escriturales. Agreguemos a este entendimiento lo siguiente:
1 Tesalonicenses 2:13 Por eso también nosotros siempre damos gracias a Dios de que, cuando ustedes recibieron la palabra de Dios que nosotros les predicamos, no la recibieron como mera palabra humana sino como lo que es, como la palabra de Dios, la cual actúa en ustedes los creyentes.
La Escritura afirma de sí misma que se propone actuar en ustedes los creyentes, es decir cambiar a aquellos que creen en Él.
En consecuencia:
PUESTO QUE LA BIBLIA ES LA PALABRA DE DIOS PARA EL HOMBRE, ENTONCES CADA CAMBIO QUE UNO QUIERE HACER DEBE ALINEARSE CON SUS ORDENANZAS.
Notablemente/Considerablemente/Significativamente y hasta la razón de nuestro esquema, las Escrituras son la base para lograr cambios adecuados. 2 Corintios 10:5 refleja y resume este primer punto cuando dice, de llevar cautivo todo pensamiento a la obediencia a Cristo.
B. UNO AMONESTA A OTRO CON LA ESCRITURA, CON EL FIN DE PRODUCIR EL CAMBIO
El segundo fundamento bíblico relacionado con el cambio se puede ver en 1 Tesalonicenses 5:14. Pablo dice, Os exhortamos, hermanos, a que amonestéis (noutheteo) a los indisciplinados, animéis a los desalentados, sostengáis a los débiles y seáis pacientes con todos. El cambio ocurre cuando uno se enfrenta a las verdades de Dios. Cambiar los resultados, de acuerdo a 1 Corintios 1:18 porque la Palabra de Dios tiene poder – el poder de cambiar los individuos cuando son confrontados por:
Porque la palabra de la cruz es necedad para los que se pierden, pero para nosotros los salvos es poder de Dios.
Isaías 55:11 amplía esta misma verdad asombrosa:
Así será mi palabra que sale de mi boca, no volverá a mí vacía sin haber realizado lo que deseo, y logrado el propósito para el cual la envié.
De ello se deduce que la Palabra de Dios es el conducto que uno necesita utilizar en consejería o tutoría (o mejor, amonestar) para ver un cambio. (Tenga en cuenta que de aquí se origina el término Consejería de amonestación. Ésta es una forma de consejería pastoral que está totalmente basada en la Biblia y se centra exclusivamente en Cristo. Renuncia a la psicología convencional y psiquiatría como humanista, porque a menudo son contrarios a los principios bíblicos). Dice en Hebreos 4:12 Porque la Palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que cualquier espada de dos filos… A menudo, Dios usa a otros creyentes a través de su amistad o escritos para amplificar Su Palabra en nuestras vidas. Busque esto y esté abierto a ello. Es así cómo Dios quiere crear bíblicamente los cambios en tu vida.
C. LA REACCIÓN A LA AMONESTACIÓN BÍBLICA NECESITA SER ARREPENTIMIENTO
Construyendo desde los dos primeros puntos relativo a los fundamentos bíblicos relacionados al cambio es cómo uno responde ser amonestado por la Palabra de Dios. Cómo responder al ser amonestados por la Palabra de Dios es muy importante si estás creciendo. Para esta comprensión es fundamental 2 Timoteo 2:25:
… corrigiendo tiernamente a los que se oponen, por si acaso Dios les da el arrepentimiento que conduce al pleno conocimiento de la verdad.
La respuesta bíblica apropiada a las amonestaciones de la Palabra de Dios no es, “No necesito cambiar, ya soy perfecto,” ni es “lo dejo en las manos de Dios” tampoco es “voy a equilibrar la balanza por mí mismo.” Al contrario de estas opiniones aberrantes mencionadas del proceso de Santificación, este pasaje revela que el arrepentimiento (metanoia) que significa “un cambio de mente, dirección y propósito” es la clave para el proceso de crecimiento del creyente. Es importante destacar que las Escrituras revelan aquí y en otros lugares (ver Hechos 5:31, 11,18; Romanos 2:4; 2 Corintios 7:9-10; Efesios 2:7; 2 Timoteo 2:25) que el arrepentimiento es producido por la gracia soberana de Dios: por si acaso Dios les da…
En otras palabras, como la fe para creer en Cristo (por ejemplo, Efesios 2:8-9):
EL ARREPENTIMINTO, TAMBIÉN, ES UN REGALO DE DIOS. EL QUE ESTÁ ATRAPADO EN EL PECADO Y DESEA EL CAMBIO DEBERÍA GRITAR CON HUMILDAD, “¡DIOS TENGA MISERICORDIA DE MÍ Y ME DÉ EL DON DE ARREPENTIMIENTO DE MIS PECADOS!”
Arrepentimiento conduce a un cambio duradero; ¡es el elemento clave de la Santificación progresiva! Quien subraya esto es Jeremías 13:23. Aquí afirma que cualquier cambio aparte del dado por Dios es inútil:
“¿Puede el etíope mudar su piel, o el leopardo sus manchas? Así vosotros, ¿podréis hacer el bien estando acostumbrados a hacer el mal?”
El punto de Jeremías es que los pecadores en sí mismos no pueden cambiar la esencia de su propia naturaleza. Por lo tanto, la única manera en que uno puede lograr un cambio duradero es con la ayuda de Dios, que es la razón por la que clamar a Él en quebrantamiento y contrición es el único camino en que uno puede establecer el cambio para mejorar. Si usted me está siguiendo en el desarrollo de este estudio, Cómo Lograr Cambio y Crecimiento en Tu Vida tiene mucho que ver con la comprensión de qué es exactamente lo que el arrepentimiento bíblico es – en gran detalle, ya que es fundamental para lograr el crecimiento, o Santificación en el aquí y ahora.
D. LA AFIRMACIÓN RECURRENTE DE PABLO DESCRIBIENDO EL CAMBIO
En las cartas de Pablo a las iglesias de los romanos, efesios y colosenses a menudo habla de crecimiento espiritual: es decir, la Santificación o cambio en términos de “quitarse” y “ponerse.” Está diciendo que para crecer espiritualmente, el creyente debe poner a un lado el viejo hombre y revestirse del nuevo. Efesios 4:22-24 resume mejor esto cuando Pablo afirma:
Que en cuanto a vuestra anterior manera de vivir, os despojéis del viejo hombre, que se corrompe con los deseos engañosos, y que seáis renovados en el espíritu de vuestra mente, y os vistáis del nuevo hombre, el cual, en la semejanza de Dios, hay sido creado en la justicia y santidad de la verdad.
Clave de nuestro estudio, en relación a cómo el creyente efectúa cambios en su vida es la idea de despojarse del viejo hombre o quitárselo. Y, sinónimo de quitar o despojar es la palabra griega para el arrepentimiento. Significa girar 180 grados, es sacar algo de tu vida que no es agradable a Dios.
De ello se deduce que el arrepentimiento, despojarse, es un elemento clave, esencial para el crecimiento cristiano. Dada las nociones básicas relacionadas a la Santificación, y qué claves, ¿cómo podemos comprender mejor lo que es característico del verdadero arrepentimiento? Lo que sigue puede parecerse un poco a “mala hierba” sobre este asunto, pero precisamente entender a fondo a lo que la Biblia se refiere por arrepentimiento es de suma importancia ya que lleva al ¡crecimiento espiritual! ¡Es el punto de partida del crecimiento espiritual! En consecuencia, el fallar en este aspecto es fallar en el crecimiento espiritual.
¿CUÁLES SON LOS INDICADORES BÍBLICOS DEL ARREPENTIMIENTO?
¿CUÁL ES LA DIFERENCIA ENTRE LA TRISTEZA Y EL ARREPENTIMIENTO VERDADERO?
2 Corintios 7:9-10 quizás es el mejor pasaje del Nuevo Testamento que delinea cuidadosamente las características del genuino arrepentimiento. Dirijamos ahora nuestra atención a cómo podemos comprender mejor este pasaje.
III. EL CONTEXTO DE LA INSTRUCCIÓN SOBRE ARREPENTIMIENTO GENUINO
Lo que sigue es 2 Corintios 7:9-11 que delinea, detalla y define varios componentes del verdadero arrepentimiento:
pero ahora me regocijo, no de que fuisteis entristecidos, sino de que fuisteis entristecidos para arrepentimiento; porque fuisteis entristecidos conforme a la voluntad de Dios, para que no sufrierais pérdida alguna de parte nuestra. Porque la tristeza que es conforme a la voluntad de Dios produce un arrepentimiento que conduce a la salvación, sin dejar pesar; pero la tristeza del mundo produce muerte. Porque mirad, ¡qué solicitud ha producido en vosotros esto, esta tristeza piadosa, qué vindicación de vosotros mismos, qué indignación, qué temor, qué gran afecto, qué celo, qué castigo del mal! En todo habéis demostrado ser inocentes en el asunto.
En esta porción de 2 Corintios, Pablo está rastreando la relación pasada que ha tenido con los creyentes en Corinto. En resumen, durante su segundo viaje misionero, Pablo pasó 18 meses estableciendo personalmente esta iglesia. Algún tiempo después de haber plantado esta iglesia envió a su emisario, Timoteo, a Corinto (1Corintios 4:17; 16: 10,11). Como resultado de esto, Pablo descubrió que autodenominados falsos apóstoles poblaban la asamblea, y su celo de poder, habían castigado a Pablo y trataron de persuadir a la congregación para que ya no sigan sus enseñanzas. Cuando él se enteró de estas noticias amotinadoras, Pablo partió inmediatamente (desde Éfeso) a visitar Corinto. Para su profundo pesar, desde su llegada, probó del fruto amargo de los falsos maestros, experimentando la deslealtad de tantos en el rebaño, un rebaño en el que trabajó arduamente para establecer. En consecuencia, y reactivamente, a su regreso de Éfeso, fue autor de lo que ahora se conoce comúnmente como la “Carta Severa” (ref. 2 Corintios 2:4) enviarlo a Corinto a través de su amado y fiel discípulo, Tito.
Tras su posible reconexión, Tito dio un informe sorprendentemente cálido a Pablo cómo la iglesia de Corinto aceptó la “Carta Severa”. Específicamente, ¡muchos se habían arrepentido de su rebelión contra el apóstol! Pablo estaba muy contento de enterarse esto (según el texto bajo estudio aquí en 2 Corintios). Es en este contexto más amplio que las palabras de 2 Corintios capítulo 7 necesita ser entendido: Como resultado de la rebelión y el posterior arrepentimiento de la congregación, el Espíritu Santo nos está otorgando lo que connota el verdadero arrepentimiento en la vida de un creyente. De nuevo, quizá no exista mejor pasaje en toda la Biblia que la que se encuentra en 2 Corintios 7:9-10 que revela conmovedoras ideas que todos los seguidores de Cristo necesitan tener en relación con el genuino arrepentimiento.
IV. OCHO ASPECTOS DE GENUINO ARREPENTIMIENTO
Verdadero, genuino arrepentimiento y cambio, dice Pablo, es caracterizado por al menos ocho actitudes y acciones relacionadas que están motivadas por la presencia santificadora de Dios en la vida del creyente.3 “Pablo expande (sobre el asunto de tristeza piadosa) en toda una serie de actos o disposiciones, todos los cuales son inspirados por ese dolor, según Dios.”4 Estas características derivan de las palabras usadas por Pablo, en el pasaje de 2 Corintios.
A. SOLICITUD (Spoude)
Cuando un creyente expresa su tristeza de una manera piadosa, habrá una clara conciencia de ser solícito de parte suya para procurar ansiosa y firmemente la dirección correcto. Habrá, como un comentarista dice, “velocidad involucrada en la realización de un asunto… la disposición de hacer algo de buena fe.”5 Aquí está la reacción inicial de un genuino arrepentimiento que es transmitido desde arriba.
LA PRIMERA CARACTERÍSTICA ENTONCES, DE GENUINO ARREPENTIMIENTO ES LA TRISTEZA PIADOSA; CUANDO ESTÁ PRESENTE, CUANDO ES DADA POR DIOS, PRODUCE UN SENTIDO DE ESFUERZO Y PRISA QUE SE AUTO FORMA DESDE DENTRO
Existe una resolución que se convierte en realidad: una motivación interna, una solicitud para “dar frutos dignos de arrepentimiento” (Mateo 3:8)
B. VINDICACIÓN (Apologia)
El Nuevo Comentario Internacional del Nuevo Testamento (NCINT) declara con respecto a la característica específica de vindicación, “Cuando ellos (los creyentes impenitentes de Corinto) pensaban en la deshonra que el pecado había traído a la iglesia, estaban muy ansiosos por limpiarse de complicidad y estaban enojados con ellos mismos por haber permitido tal cosa.” Es la segunda marca de verdadero arrepentimiento. Como un comentarista escribió: “un deseo para limpiar el nombre del estigma que acompaña el pecado, el pecador arrepentido restaura la confianza y seguridad de otros demostrando que su verdadero arrepentimiento sea conocido”. Así existe una solicitud para rectificar visiblemente, vindicar lo que el pecado causó. A la inversa:
EL FALSO ARREPENTIMIENTO ESTÁ CARACTERIZADO POR UNA ACTITUD QUE PERMANECE ALOJADO EN UNO MISMO – MUCHO MÁS PREOCUPADO POR EL DAÑO A LA IMAGEN PERSONAL QUE EN LA PRONTITUD PARA REMEDIARLO
Esta persona impenitente permanece colgado en sí mismo, y las consecuencias que derivan de sus acciones: su reputación y su posición entre compañeros permanece más importante. El verdadero arrepentimiento está caracterizado siempre por un deseodado por Dios para reivindicar inmediatamente un asunto, buscando a quienes ha ofendido, pidiendo su perdón y por lo tanto exime el mal hecho. Dicho de otra manera, a los verdaderamente arrepentidos, la auto preservación externa es menos importante que glorificar a Dios. Cuando a una persona le falta unción para vindicar es porque no está verdaderamente arrepentida.
C. INDIGNACIÓN (Aganaktesis)
Esta misma palabra griega traducida al español como indignación, usada en otros lugares en varios otros relatos evangélicos, lleva la idea de estar enojados por los propios actos erróneas. El padre de la iglesia primitiva, San Juan Crisóstomo, interpretó que esta porción del pasaje significa que el creyente auténticamente arrepentido se caracterizará por una indignación personal o ira “debido al escándalo que había permitido continuar sin control en la iglesia y la afrenta consiguiente al santo nombre de Dios”. Aquí hay otra clara indicación de arrepentimiento genuino: el creyente poseerá un interno aborrecimiento y enojo por su pecado y un descontento relativo a la indignidad que ha llevado en el nombre del Señor y de Su iglesia. En la actualidad, esta legítima indignación es una bendición de Dios que puede asemejarse a la interna presión encontrado en un volcán. Habrá un auténtico odio hacia uno mismo que se elabora dentro del corazón del creyente, un odio a sí mismo que sólo puede encontrar su liberación a través de la rectificación total con las partes ofendidas.
D. TEMOR (Phobos)
Además de sus remordimientos internos, los obstinados creyentes corintios temían la autoridad apostólica de aquél a quien habían sido desleales. Ellos temían que pudiera pedir retribución por sus caminos pecaminosos, de hecho, con vara (véase 1 Corintios 4:21). Una característica evidente de verdadero arrepentimiento implica que habrá un temor saludable no sólo de Dios, sino de aquellos a quienes el pecado ha perjudicado.
Para resumir los primeros cuatro puntos:
EL GENUINO ARREPENTIMIENTO ES DE AQUELLOS QUE POSEEN UNA SOLICITUD PARA VINDICARSE CON LA PARTE OFENDIDA. ESTA MOTIVACIÓN SURGE DE LA LEGÍTIMA INDIGNACIÓN. Y TAMBIÉN ESTÁ PRESENTE EL TEMOR AL JUICIO RETRIBUTIVO DE UN DIOS SANTO Y JUSTO
E. ANHELO PROFUNDO (Zelos)
La palabra griega Zelos se deriva al español como celos de. Su raíz significa “un deseo fuerte.” En el contexto de este pasaje significa un anhelo profundo o fuerte deseo de restablecer una relación con alguien a quien uno ha pecado en contra. Similar al No. 2 (la vindicación de uno mismo que tiene en mente al ofendido, detalles externos para resolver el asunto y situación), el anhelo profundo mencionado aquí se refiere más bien a un deseo vehemente emanado de una aspiración interna del corazón.6 Los creyentes corintios, en su arrepentimiento genuino, manifestaron un celo interno para honrar a Pablo y su autoridad apostólica. Además, deseaban fuertemente repudiar a los falsos intrusos en la iglesia. Más profundamente, poseían un anhelo de seguir el ejemplo de Pablo, uno de devoción incondicional a la causa de Cristo.
Todas estas actitudes expresan una compunción motivada por Dios para hacer lo correcto. ¿Por qué? John Murray afirma, “La (verdadera) regeneración es la renovación del corazón y la mente, y el corazón y mente renovados deben actuar de acuerdo con su naturaleza.”7 El genuino arrepentido siempre anhelará y deseará relaciones correctas con otras personas. En Romanos 12:18 Pablo resume brevemente las características antes mencionadas cuando dice: Si es posible, en cuanto de vosotros dependa, estad en paz con todos los hombres.
F. CELO (Epipothesis)
Otra actitud consistente con el verdadero arrepentimiento es el celo que los creyentes corintios poseían para defender a Pablo y oponerse a los falsos maestros que se habían apoderado de la iglesia de Corinto. NICNT declara, (los creyentes corintios deseaban) “ver la restauración de su antigua relación de confianza y afecto.” La respuesta a la “Carta Severa” de Pablo no fue con ira, sino aleccionador, aceptando y comprendiendo que ellos habían sido desleales con el apóstol. Ellos adoptaron la opinión de Pablo sobre los falsos maestros; tomaron la causa de Pablo como propia! Dios nos capacita con arrepentimiento genuino que produce esa clase de celo, el dar un giro de 180 grados sobre un asunto. Ellos tenían celo por reafirmar su amor y lealtad hacia él. Por el contrario, las personas que no se arrepienten o están tristes de una manera egoísta seguirán siendo desleales, y evitarán adoptar la opinión contraria con respecto a una ofensa. Se caracterizan por no admitir cualquier equivocación y continúan acusando a la otra parte.
G. CASTIGO DEL MAL (Ekdikesis)
Quizá la indicación más fuerte de verdadero arrepentimiento es la que es más difícil de realizar por medios distintos a los que Dios ha dado. En un arrepentimiento empoderado por Dios, el pecador no piensa en protegerse a sí mismo. La preocupación principal es que se haga justicia. Un comentarista declara, “él quiere ver el pecado vengado no importa lo que pueda costar.” Si Pablo se refirió o no, en nuestro pasaje a los Corintios, castigar el mal con respecto a sus relaciones interpersonales o castigar el mal por haber permitido que los falsos apóstoles lideren en la iglesia es un tema no relacionado con este estudio. En ambos casos, ¡el humilde creyente corintio tiene un deseo de buscar la reconciliación! El objetivo que ocupaba toda su atención era poner su casa en orden no importando el costo. Cuando ésta es la actitud de uno, entonces el crecimiento espiritual salta a la vista:
TAL ACTITUD ES INDICATIVO DE UN SINCERO DESEO DE NUNCA HACERLO DE NUEVO – Y AHÍ ESTÁ EL CRECIMIENTO ESPIRITUAL –L A SANTIFICACIÓN PROGRESIVA SE LOGRA
H. INOCENTES EN EL ASUNTO (Hagnos)
La última palabra característica que Pablo elige para expresar lo que, bajo la inspiración del Espíritu Santo, tipifica el verdadero arrepentimiento es la inocencia de los corintios con relación a su pasado de pecado. La palabra griega para inocente significa “claro” o “puro, santo.” Él escogió esta palabra por la connotación que tiene que ver con un ritual de pureza. Sin entrar en mayores detalles o ilustraciones, la idea que aquí se transmite es que, si se sigue un procedimiento, entonces el resultado será la pureza. Y eso es exactamente el por qué Pablo elige esta palabra al final de su lista de características de identificación. Las palabras que Pablo eligió muestran una hermosa ilustración humana de la teología detrás de 1 Juan 1:9, que dice lo siguiente:
Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonarnos los pecados y para limpiarnos de toda maldad.
Los creyentes de Corinto en la mente de Pablo, eran ahora inocentes del asunto porque habían confesado y se habían arrepentido de su pecado, como era más que evidente por las siete nuevas actitudes y acciones anteriores indicadas en y por este interesante pasaje. Es importante notar que Pablo no nombra el pecado aquí, él simplemente lo llama el asunto. ¿Por qué? Porque habían controlado satisfactoriamente su pecado como lo demuestran sus acciones de tristeza piadosa, en la mente de Pablo, el pasado había sido “como la nieve serán emblanquecidos” (Isaías 1:18) porque han tenido “frutos dignos de arrepentimiento” (Mateo 3:8). En Filipenses aprendemos que Pablo practicó olvidando lo que queda atrás (Filipenses 3:13). Como el pasado se había corregido era tiempo de seguir adelante, no revivirlo. Pablo está expresando una actitud de euforia sobre la finalización del asunto. Este pasaje entonces es una bella narrativa del logro del crecimiento espiritual:
EL INDICATIVO DE UN VERDADERO CRECIMIENTO ESPIRITUAL ES ÉSTE: CUANDO LA DESHABITUACIÓN Y REHABILITACIÓN HAN SIDO ALCANZADOS
V. RESUMEN
Estas ocho características del genuino arrepentimiento son básicas para el crecimiento espiritual – correcta y completamente alejándose del pasado y avanzando hacia lo correcto en el futuro. Dejando y poniendo, deshabituando y rehabilitando.
Una especie de dolor egocéntrico de tipo mundano sobre el pecado se manifestará poco si es que hay alguna de estas características de arrepentimiento verdadero y genuino. Además como una respuesta al pecado – aferrarse a ella – es el estancamiento de su crecimiento espiritual. Recuerde que la palabra griega para el arrepentimiento significa “un cambio de mentalidad”, mientras lupe la palabra griega para tristeza significa “dolor del cuerpo.” Arrepentimiento es la clave fundamental para una vida de cambio y crecimiento. Como tal, uno madura en la vida cristiana a través del genuino arrepentimiento. Así que, ¡presta mucha atención a lo que Dios pone en tu corazón que necesitas cambiar! ¡Apártate de ellos rápidamente y ponlos detrás de ti para siempre y avanza hacia la Santificación en Cristo! ¡Amén!cm
1 2 Corintios 5:17 declara, De modo que si alguna está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron, ahora han sido hechas nuevas.
2 Dado que la salvación se revela explícitamente en las Escrituras como un regalo para aquellos que por fe se arrepientan y reciban a Jesucristo como Señor.
3 Como se dijo, el arrepentimiento es en realidad un regalo de Dios, dado junto con la capacidad de creer en Cristo, en el día de salvación. De manera importante y adicional, este don de arrepentimiento esta en marcha en su operación, no solo en la salvación, sino en la santificación (a lo largo de la vida del creyente) como lo infiere el Apóstol en este pasaje que estamos estudiando.
4 The Expositors Bible, Second Corintians.
5 New International Dictionary of New Testament Theology (NIDONTT).
6 Siempre que Pablo habló de un buen deseo en el Nuevo Testamento, (como lo hace 13 veces) usa esta palabra griega que se traduce como anhelo. (A la inversa, cuando habla de un deseo lujurioso y erróneo, usa epitimia).
7 (Redemption Accomplished and Applied, pg. 106).